Un mantel de papel, una apuesta y un deporte

Es costumbre de muchos bares la de vestir las mesas con manteles individuales de papel, de esos en los que el mapa de la región viene ilustrado, captando la atención de locales y turistas, e invitando a nuestra imaginación a recorrer cada punto destacado en ellos.  Así fue como cuatro amigos se encontraron entre el fervor de los vasos de cerveza vacíos, en un bar de Estocolmo, trazando una línea que atravesaría casi 75 km de tierra y mar a través del archipiélago, y retándose a cubrir dicha distancia a pie y a nado. ¿La recompensa? La segunda pareja en llegar, pagaría los gastos de la primera. 

Nació así un deporte nuevo, ÖtillÖ, en sueco de isla a isla, acuñado posteriormente como Swimrun, en el que el trail running y la natación en aguas abiertas se encuentran para dar origen a un nuevo reto para los amantes del deporte de aventura y resistencia. Un deporte relativamente joven, con apenas 20 años de historia, que no deja de crecer, y que representa una alternativa para aquellos que disfrutan de las pruebas multi deporte como el triatlón o el acuatlón.

 

Sin pertenecer a ninguna federación, ni estar regido por estrictos reglamentos, el Swimrun se establece como una carrera por parejas en las que el paisaje de la distancia a cubrir entre la salida y la meta determinará el recorrido y los tramos de carrera a pie y a nado. La pareja deberá terminar al mismo tiempo y todo el material empleado debe ser portado hasta el final. Un deporte de  aventura que a menudo nos permite conocer e interactuar con la naturaleza y el medio de un modo especialmente singular. Cada año, se celebra en Suecia el campeonato del mundo, conmemorando su lugar de origen, en una de las pruebas considerada como una de las más duras del planeta. 

Pero no solo se practica en Suecia, ni todas las carreras son de distancias tan duras. A medida que se ha ido popularizando el deporte, son numerosas las organizaciones que proponen distancias más asequibles y para todos los públicos, además de las distancias más endurance. A día de hoy encontramos carreras en lugares con paisajes tan sorprendentes como la Costa Brava en Cataluña, en las islas Azores, les Gorges de la Loire en Francia… y de distancias tan accesibles como la distancia “súper sprint” de entre 5 y 10km.

 

 

El equipo empleado puede reducirse a un mínimo, pero existe cierto material que recomendamos le dediques atención de cara a prepararte para tu aventura. Si algo caracteriza al Swimrun es la posibilidad de nadar con elementos de flotación y palas, saber escoger cuales se adaptan mejor a nuestras necesidades y saber cómo portarlas es importante. Las palas representan un elemento de propulsión muy demandado, ya que nos ayudará a avanzar más rápido. Dependiendo de nuestra tecnicidad escogeremos palas más ergonómicas si somos principiantes o más grandes y planas si estamos habituados a nadar con ellas. Para transportarlas durante los segmentos de carrera a pie, dependiendo de su tamaño, podremos guardarlas en los bolsillos del neopreno o bien darles la vuelta en las manos y correr con ellas.

El pull buoy es otro de los elementos que tendremos en cuenta, importante para contrarrestar el hecho de que nadaremos con las zapatillas de correr puestas y para ayudarnos a mantener una posición lo más hidrodinámica posible en el agua. Este pull se diferencia del de piscina por venir con una cinta elástica que nos permitirá sujetarlo a nuestro muslo y así poder correr con las manos libres. Es importante entrenar previamente y comprobar que no nos ocasiona ningún tipo  de fricción ni en la piel, ni en el neopreno, ya que puede dañarlo.

 

 

Por último, y quizás lo más importante, la elección del neopreno.. A pesar de compartir características en cuanto a los materiales utilizados en su fabricación, ya a primera vista podemos diferenciar un neopreno de Swimrun de aquellos pensados para el triatlón o las aguas abiertas. Nos encontraremos con un neopreno funcional, que sin renunciar a características térmicas o de flexibilidad, se caracterizará principalmente por ser corto en ambas extremidades, facilitando la carrera a pie, y contará también con la cremallera frontal, para poder bajarla si fuera necesario fuera del agua. Además cuenta con bolsillos, que nos serán de gran utilidad durante la prueba.

Existen otros accesorios con los que complementar nuestro equipo, como manguitos de neoprenos o elásticos, pero será la experiencia la que nos irá instruyendo en cómo enfrentarnos a este épico reto que representa el Swimrun.

Un deporte que resulta en una experiencia de interacción única con el medio, donde la carrera cambia y se construye según avanza en el terreno, entre rocas y entre olas, caminos y ríos, ya que cada swimrunner triunfa cuando se funde con la naturaleza que lo rodea, pues importa más el viaje en sí mismo, que la meta.